"LOS DEL UNO UNO" HACEN MUDANZA...

PUES SÍ, VAMOS PROGRESANDO, Y NOS CAMBIAMOS DE NIDO. ASÍ QUE A PARTIR DE AHORA ESTAMOS EN LA SIGUIENTE DIRECCIÓN:

www.losdelunouno.com

Y encima estrenamos FORO:

http://www.losdelunouno.com/forum/

Nos seguimos viendo...

domingo, 16 de agosto de 2009

LAUJAR - PATENA - LOS CERECILLOS - LAUJAR (2ª parte): huyendo de las calores...

Hola tí@s,

En nuestro afán por compaginar las salidas en bicicleta y el intento por no sufrir los calores del veranito almeriense, "Los del Uno Uno" seguimos saliendo los sábados por la mañana, y en la medida de lo posible buscando rutas alejadas de donde "el señor Lorenzo" castiga con más fuerza.

Y por ello, la elección de la ruta que hemos hecho cumple hasta el extremo con estas condiciones, sin por ello quitarle el más mínimo ápice de auténtico mountain bike.
Unos 50 kms. entre pinos, montañas, pistas forestales, cascadas, pueblos alpujarreños y vereas de todo tipo... Total, la etapa "10".

La hora de salida era como siempre a las 8 de la mañana, y pensando que llegaría el primero llegué al sitio de kedada temprano, encontrándome la agradable sorpresa de ver por allí a "Don Tomás", que sin avisar ni ná, no podía faltar a "su etapa".
Preparamos bicis y en ésto llega Lechu, un nuevo cucaracha ya de manera oficial, impoluto con su nuevo "traje de matar"... ¡Cómo brilla ese naranja! ¡Qué bien luce en él esas cucarachas! Y encima lleva la "nueva versión"... Tan bonico...

LECHU VESTÍO DE GUAPO

Y también prepara su bici. Y como quien no quiere la cosa, y demostrando la apatía de por la mañana por hacer un mínimo esfuerzo por poner a punto la "señora", saca de su fragoneta un minicompresor pa´ darle aire a las ruedas... Sin palabras... Lo que hace la gente por no usar un bombín y dar aire "como los hombres"... ¡¡NENAZA!! Al menos haber hechado el adaptador para válvula fina, así podría haber hinchado a mi Jamilda (y te hubieses librado de esta crítica, jejeje).

Y un poco más tarde aparace Carpi, y ya sólo falta Amancio. Lo esperamos hasta las ocho y veinte más o menos, y sin saber qué habrá pasado nos ponemos en marcha (esta semana nos damos los teléfonos, que me jode saber que viniste y nosotros te dejamos en tierra, lo siento tío).

Cuatro cucarachas en camino, y el quinto estaba pernoctando en Bayarcal, o más bien ajumándose en dicho lugar.
Después de una noche de desenfreno y alcohol, y con pocas horas de sueño, Juan bajaría hasta encontrarnos a mitad de subida por carretera.

La subida por carretera se hace llevadera. Se hacen kms. con facilidad; y en poco tiempo estamos en Paterna. Allí bebemos un poco de agua de sus magníficas fuentes y planeando nuevos retos para "Los del Uno Uno" (salidas, proyectos y demás), seguimos haciendo camino.

A Juan lo encontramos a la salida del pueblo, y como si un "superguerrero" de Bola de Dragón se tratara, su cuerpo desprendía un aura fácilmente reconocible a distancia, provocada por la injesta nada comedida de alcohol de la noche anterior... ¡Vaya ojitos figura! ¡Vaya aroma desprendías criatura! ¡¡Vinagre, que eres un vinagre!! Pero con dos güevos estaba el macho dando pedales tres horas después de que la última gota de ron cayese por su garganta... (con esta cucaracha si que es verdad que no puede nada).

¡¡QUÉ CARICA MADRE!!

Y llegamos al cruce donde cogemos la pista forestal.
No es el mismo sitio donde la cogimos la vez anterior con Javi y Carpi. Este cruce es algo más arriba. Nosotros nos desviamos por el cruce de la "Balsa Grande", justo al salir de Paterna; y esta vez la subida por la carretera es algo más larga, cosa que se agradece luego al ver la diferencia entre un camino y otro.
Si el itinerario que escogimos la vez anterior es más corto, también tiene una pendiente mucho mayor, bastante mayor, y las piernas lo sufren.




La pista forestal, evidentemente es en subida, pero una subida tendida y llevadera, en la que Tomás se siente cómodo y pone una marcheta infernal que nos lleva a Juan y a mí con él.
Evidentemente los estragos de la noche anterior tenían que hacer mella en Juan, y éso, sumado al ritmo de Tomás, hizo que se descolgara.
Por detrás Carpi y Lechu van un poco más despacio, ya que este último está sufriendo los efectos de llevar un tiempecico sin "montar a la señora" (hablamos de bicis mamonazos, Dios me libre de meterme en la intimidad del lecho conyugal de un compañero...).

Hacemos unas paradillas para reagrupar y tomar un poco de aire, pero mínimas. Y Tomás sigue a lo suyo. Apretando como un loco. Se nota que los entrenos entre semana les están ayudando. Como siga así, a éste hay que llenarle las ruedas con plomo... Buen ritmo llevabas mamonazo. Pero yo contigo, jejeje.

La primera parada oficial es poco antes de mitad de recorrido, justo cuando acaba la subida.
Esta parte la hemos hecho sin un pizca de calor. Incluso a veces venía un poco de brisa fresca que nos revitalizaba para seguir haciendo kilómetros.
Juan viene echando pestes (literalmente), y el amasijo de alcohol y comida empieza a bullir peligrosamente dentro de él. Mejor darle distancia...
Tomás está muy entero y para sorprendernos aún más con sus investigaciones sobre sustancias dopantes, nos cuenta la última: cóctel de vitaminas a primera hora de la mañana. Una jartá de pastillas para darle fuerza y energía... Yo no digo ná, pero ésto tendríamos que controlarlo más, que desvirtúa las salidas...
Llegan Lechu y Carpi. El primero hechico polvo. Un pajarón del demonio, pero al menos con el consuelo de saber que lo duro ha pasado.

Un ratico de casquera y otra vez en marcha.
El camino hasta Los Cerecillos es bastante llevadero. Llaneos con alguna que otra rampilla graciosa, pero un terreno para disfrutar de las vistas. La baja alpujarra a nuestros pies, con Paterna en primera persona. Unas vistas impresionantes. Y lo que es mejor: calor "0".

PARAJES DE LA ZONA

Las estampas típicas de la zona empiezan a aparecer: caídas pequeñas de agua en pleno mes de agosto, zonas despejadas de árboles que dan paso a frondosos bosques de pinos. Los picos de la zona majestuosos encima nuestra, y la gente del campo ganándose los duros.

Y llega la lección del día: si encuentras algún rebaño de ovejas, cabras o bichos con cuernos custodiaos por un nativo, castigao por el sol y curtío en estas sierras, que tu primera reacción no sea un comentario al estilo "¡¡Yeah, yeah..., cabra, cabra!!"
Que hay un perro pastor encargao de la guardia y custodia de los animalejos...; que por si acaso ya está el buen hombre pa´ encargarse del ganao...; y que no hace falta que naide intente actuar como un buen pastor, porque las consecuencias pueden ser fatales...
Así que ya podeis imaginar a Juan y Tomás chistando a las cabricas. Éstas espantás vivas y el cabrero con ganas de coger la onda maldiciendo las ideas de estos personajes...: "¡¡¡QUÉ LAS CABRAS TAMBIÉN TIENEN DERECHO A LA VIDA!!!", fue la reacción del buen hombre...
Quién le iba a decir al señor que una panda de piltrafillas en bicicleta iban a perturbar la paz de su rebaño... Nosotros pies en polvorosa y a salir "juyendo" de allí, no fuera a ser que el hombre se empleara con nosotros (parecía el ioputa "er tío la vara"). Pero no llegó el agua al río.

"¡¡PROBES CABRICAS!!"

Nosotros seguimos y llegamos al cruce para coger Los Cerecillos. Ya estamos casi en el punto de descenso, y paramos nuevamente esta vez para reagrupar, después de otro superataque de Tomazito (putas vitaminas sa´ tomao el personaje).

Ahora son Juan Y Tomás los que se ponen a tirar, y enfrascados en un pique brutal se pasan la entrada a la primera verea del día: un minisendero del "Sulayr" que desemboca justo donde empieza la verea de Los Cerecillos.
El sendero está lleno de piñas, ramas secas y rodeado de pinos. Las curvas y contracurvas son continuas, y a pesar de ser muy corto no está nada mal. Juan y Tomás ya están allí.

Aquí paramos para comer un poquillo y echar unas fotos de grupo. Las ansias por bajar son grandes y todos estamos decididos a disfrutar. Juan empieza a preguntar que tal estará el sendero, que lo va a hacer, que poco a poco tiene que bajar... Éste al menos lo hará...

"LOS HERMANOS DALTON..."

Yo me tiro primero, Lechu me sigue, Tomás detrás de él, y Carpi y Juan cierran el grupo en este orden.
Arriesgo, cada vez más, pues mi Jamilda me da confianza. Cruzadas en las curvas, saltos en los trancos. Comodidad máxima bajando con mi "señora". Y el Lechu no se despega demasiado. Es la primera vez que hace el sendero y disfruta como un niño chico.
Por detrás el resto va llegando. Tomás un poco más rápido, Carpi algo menos, y Juan a su ritmo, cogiendo confianza. Poco a poco.

El próximo objetivo es una miniverea que descubrimos la vez anterior que rodea el refugio de Monterrey. Está sucia, mucha piedra suelta en el camino y algún que otro agujero, pero está guapa. Decidimos, después de hacerla, que tenemos que venir a limpiarla. Es corta y en media horilla cuatro o cinco tíos la limpian fácil.

Y llegamos al cruce para coger el sendero de Monterrey. Carpi se tiene que ir porque le espera la familia y Juan lo acompaña. Hoy sólo ha hecho la verea pequeña de Los Cerecillos y, a pesar de que este sendero está muy limpio y no es nada complicado, decide bajar por la pista.

Y nosotros a lo nuestro. Tomás se tira primero, yo después y cierra Lechu.
Vamos separados y cuando llega la primera zona de curvas alcanzo a Tomás y me llevo un minisusto justo cuando intento adelantarlo en una de las curvas. Nada. Sólo tuve que poner pie a tierra y seguir el descenso.
Me tiro muy rápido. Para lo que he hecho yo anteriormente, rapídisimo. La diferencia con la Mondraker que tenía antes es abismal. La bici no se me mueve a pesar de ir como un tiro para abajo. Acojonante. Y llegan las zonas de curvas y otra vez más mejoras en mi montura. Toco el freno y la bici se clava (igualito que los v-brake que llevaba antes, jejeje).

Así que convinando zonas rápidas con zonas técnicas llegamos al recién creado "salto del Ángel", o mejor dicho "salto del Lechu": éste pierde el control de la burra y para evitar un despeño monte abajo, salta de la bici y ésta monte abajo. Ha cogido rápido el concepto de "cucarachas bicivoladoras" ¡¡En el mundo bendito si no llegas a soltar la bici donde acabas!! Pero no pasó nada, y a la Mondraker tampoco, son indestructibles...

Seguimos bajando y nos encontramos algún que otro repecho apañao, y cogiendo el testigo de "Javi el pupas", al Lechu es nuevamente a quien le pasa otro percance: calambres y más calambres..., pero ahí estaba Tomás con su botiquín pa´ darle un masajico al pobre hombre. Listo en un plis - plas.

Y seguimos. Y estamos acabando. El último tramo recuerda a Celín y sus senderos. La vegetación ha cambiado y el terreno también. En vez de ser la tierra dura de antes, ahora estamos en senderos de tierra suelta, similares a las vereas de Clavero.

Ya hemos terminado de "verear" y las conclusiones son claras: este sendero no tiene nada que envidiarle a ningún otro. Siempre estará por encima "El Aguadero" o "Fuente Alta - La Mosca", que duda cabe, pero como alternativa es muy válida.

Ya sólo nos queda cruzar Laujar para llegar a los coches, y allí, con un par de cervezas en el cuerpo, están subiendo las bicis Juan y Carpi... ¡¡Malditos!! ¿¿No teníais prisa!?? ¡¡Como os habeis escaqueado de la verea!! ¡¡Mamonazos!!, jejejeje

Y bueno, después de unos 50 kms. hemos disfrutado de una etapa completita, donde en pleno mes de agosto no hemos sufrido para nada los horrores del calor, y hemos disfrutado como nunca de nuestras sierras y sus bajadas.

Y para el sábado que viene etapa por Bayarcal, con barbacoa para después. Así que id pensándolo, que puede ser brutal.

Pero hasta entonces seguiremos disfrutando de la etapa vivida, y que no se os olvide...

Nos vemos... si nos miramos...

P.D.: Las fotos tendrán que esperar, paciencia...

 
¡¡¡¡NUEVO VÍDEO: SENDEROS DE CASTALA. VER SECCIÓN DE "VÍDEOS "LOS DEL UNO UNO"" EN LA BARRA LATERAL!!"
Hide Box